miércoles, 25 de mayo de 2016

Nombre científico: LARREA CUNEIFOLIA Nombre vulgar: JARILLA O JARILLA MACHO

Larrea cuneifolia (jarilla macho) es una especie botánica fanerógama de la familia Zygophyllaceae. Es endémica del oeste de Sudamérica: Bolivia (Chuquisaca); Perú (Arequipa, Ica, Moquegua), siendo una prominente especie de Chile , y de Argentina, y en especial de la Patagonia. Está estrechamente emparentada con la norteamericana Larrea tridentata.
Es un arbusto de tallos leñosos, cilíndricos y resinosos; alcanza hasta 3 m de altura. Flores amarillas. Hojas con 2 foliolos, bien soldados y convergentes. Florece de octubre a fines de noviembre. Fruto cápsula con pelos blanco grisáceos (como un copo de algodón), 5 semillas lisas, arriñonadas. Es única en dispersar el fruto completo, a pesar de que el mismo es seco y dehiscente, siendo un caso particular de "dispersión esclerendocoria". En este mecanismo es el follaje el elemento atractivo para el dispersor quien ingiere los frutos al consumir las hojas.
Se la encuentra en: bosques bajos, con vegetación con estrato abierto o cerrado de leñosas de hasta 15 m de alturamatorrales, con vegetación densa de arbustos en un estrato superior cerrado de leñosas de hasta 5 m de alturapastizales, con vegetación herbácea, mayormente gramíneas, de hasta 1 m de altura.
De su uso popular, la corteza y las hojas se utilizan para todo tipo de dolencias humanas y animales. Era muy utilizada como combustible, debido a que su madera es firme.
Dispone el perfil de sus hojas en sentido norte sur, de tal manera que disminuye la exposición a la fuerte insolación del medio día estival, evitando así la deshidratación. Por esto mismo, al disponerse de esta forma, sirve para identificar los puntos cardinales en días nublados.


Nombre científico: PROSOPIS FLEXUOSA Nombre vulgar: ALGARROBO, ALGARROBO NEGRO, ALGARROBO DULCE, ALGARROBA

Es endémica de Sudamérica: Argentina (Buenos Aires, Catamarca, Chubut, Córdoba, La Pampa, La Rioja, Mendoza, Neuquén, Río Negro, Salta, San Juan, San Luis, Tucumán); Bolivia (La Paz, Santa Cruz); Chile (Atacama, Coquimbo).
Prosopis flexuosa es un árbol de tamaño mediano, de no más de 10 m en altura y 6 dm en diámetro, aunque raramente se encuentren árboles tan crecidos (por las talas); tronco corto, ramas largas, decumbentes; raíz central, con crecimiento vertical primero, y luego desarrolla raíces adventicias.
Espinas axilares, Hojas uni o raramente biyugadas, caducas. Flores en racimos densos, Fruto legumbre lineal, sabor generalmente dulce, agradable, aunque esto varía mucho con los distintos tipos de suelo y con la edad del árbol (aumenta la cantidad de azúcar cuando el árbol envejece), lignificado y rico en azúcares; comprimida, recta o levemente curvada, subfalcada raramente subanular, suturas paralelas, u onduladas y submoniliforme. De color amarillo pálido en la forma típica, pero frecuentemente violáceos.
Se encuentra en zonas de 50 mm a 500 mm de precipitación anual, Prospera bajo temperaturas que van de los 48 ºC de máxima absoluta hasta los -12 ºC de mínima absoluta. Es la especie arbórea del género que más frío tolera llegando hasta la latitud de 40° S.
El árbol es tolerante a sequía, frío, sales y arena; o sea, que es extremadamente eficiente con el consumo de agua, produce la mayoría de los frutos en años de sequía, y ha sido exitosamente introducido en regiones áridas.
En Argentina, es una especie muy común en los pastizales naturales, y es abundantemente consumida por el ganado doméstico, por lo que su valor como forrajera es alto. Posee un sistema radicular extremadamente desarrollado. Es indicador de napas freáticas.


Nombre científico: ATRIPLEX LAMPA Nombre vulgar: ZAMPA O SAMPA

Es nativa de la Argentina, en las provincias de Córdoba, Mendoza, Chubut. Su hábitat es sobre terrenos interiores salinos.
Atriplex lampa (zampa, sampa) es una especie de arbusto forrajero anual, perteneciente a la familia Amaranthaceae.
Normalmente mide de 60-160 cm; pero promedia 70-80 cm de altura. Copa densa, tallo estriado, hojas pequeñas, angostas y de color grisáceas verdes, parecidas a lanzas. Flores muy pequeñas, verdosas en glomérulos reunidos en el ápice.


Nombre científico: VULTUR GRIPHUS Nombre vulgar: CONDOR

Ave voladora más grande del mundo. Rapaz. 
Presentan dimorfismo sexual, el macho con cresta, iris marrón y la hembra sin cresta, iris rojo; juvenil de color pardo marrón.
Habita en las altas cumbres de la Cordillera de los Andes y sierras altas.
Distribución: Cordillera de los Andes desde el sur de Argentina por el Oeste, hasta Colombia. También Sierras de Córdoba y San Luis. Frecuente en Mendoza. Se lo ve en los caminos de alta montaña como en Uspallata, Las Cuevas.
Sus hábitos son monógamos. Planean durante horas buscando comidas.
Se alimentan de carroña. No tienen garras para cazar. Perseguidos injustamente por los ignorantes que creen que mata ganado.
Tamaño: altura 110 cm. Peso : macho 12 kg., hembra 10 kg. Envergadura 3 m.
La incubación dura 54 a 55 días, pone 1 huevo cada dos años. Viven alrededor de 65 años.


Nombre científico: FELIS CONCOLOR Nombre vulgar: PUMA

Especie versátil, gran viajero, poderoso en el salto, muy ágil y hábil nadador. Capaz de sobrevivir en la jungla, montaña, desierto o pantano. De extraordinaria capacidad predadora. Actúa preferentemente de noche y recorre hasta 50 km . en una sola noche en busca de presas. Sin embargo sus hábitats preferidos son las zonas linderas o de transición entre los bosques y la llanura. Elige sus guaridas de acuerdo a las posibilidades del lugar donde vive, ramas gruesas de árboles, cuevas o espesuras.
Se acerca a la presa lentamente y en los últimos metros salta hacia ella. No existe presa despreciable, predominantemente carnívoro, tanto en verano como en invierno incluye vegetales en su dieta, para regular la función de los intestinos y además le sirve de " relleno" para obtener la sensación de saciedad. Su alimento preferido es la sangre, por lo que cuando le es posible matar muchos animales. En busca de presas se puede desplazar entre 15 y 18 días.
De hábito solitario, pasa la mayor parte del día durmiendo y no sale cuando hay mal tiempo. Se aparea en cualquier época del año, juntándose con la pareja durante un par de semanas. Tras 96 días de gestación, aproximadamente, nacen de 1 a 6 crías, que pesan 500 gr.. y son ciegos. Maman hasta los 3 meses, pero a los 2 meses ya incluyen carne en su dieta y permanecen con la madre hasta los 2 años. La madre sale a cazar sola dejando a sus pequeños y cuando tiene éxito regresa a compartir la presa. A partir de los 3 meses ésta los entrena para cazar. Aún antes de llegar a la madurez son capaces de matar presas.
Al nacer presentan en su pelaje manchas y rayas irregulares. El pelaje del adulto es uniforme, espeso, más abundante en el pecho, suave y corto. La coloración del pelaje puede presentar variaciones regionales.
En Argentina, se lo encuentra en las elevadas montañas de Jujuy hasta la llanuras de San Luis y el valle de Río Negro, tanto en selva húmeda como en zonas áridas.
El peso de un adulto es entre 40 y 90 kg .Delimita sus territorios con montones de hojas, ramas y otros vegetales sobre los que después orina y defeca.



Nombre científico: LAMA GUANICOE Nombre vulgar: GUANACO

Habita montañas y estepas desde Perú, Chile y Argentina, (del noreste hasta la Patagonia). En Mendoza se encuentran grandes poblaciones. Viven desde el nivel del mar, hasta los 5.200 m .s.n.m.
Viven en grupos familiares polígamos, tropillas de machos, machos solitarios. Pueden formar asociaciones defensivas con los ñandúes, uniendo el olfato y oído de los mamíferos a la vista de las aves.
La gestación dura 11 meses y pare 1 cría llamada chulengo.
Es herbívoro y vive un promedio de 20 años.
Los guanacos tienen cuellos y piernas largas y delgadas, lo cual les permite correr hasta 56 km por hora. La velocidad ha resultado ser una adaptación clave para este herbívoro por vivir en grandes praderas, sin lugar donde esconderse, hace que la mejor forma de escapar de los depredadores sea corriendo. Casi como cabras de montaña en su agilidad alpina, los guanacos pueden subir y bajar rápidamente las laderas empinadas con facilidad. Sus grandes y flexibles patas acolchadas les entregan excelente estabilidad en terrenos rocosos. Un guanaco macho adulto puede pesar cerca de 136 kilos.
Los guanacos viven en manadas grandes, compuestas de un macho dominante y varias hembras y juveniles, llamados chulengos. Cuando cumplen el primer año, los guanacos machos dejan la manada de su familia para unirse a una manada de otros jóvenes machos solteros. Alrededor de los cinco años, un macho abandonará sus amigos solteros para tratar de liderar su propio grupo de hembras. El macho dominante intenta proteger sus hembras y juveniles a todas horas, se parará en guardia o se asegurará de que otro miembro del clan actúe como “centinela”, mirando desde un punto alto si vienen depredadores.
Como todos los miembros de la familia de los camélidos, los guanacos pueden sobrevivir con pequeñas cantidades de agua por períodos de tiempo extensos.
Los globulos rojos son más abundantes en estos animales, tiene cuatro veces más cantidad que el ser humano, esta densidad les permite circular suficiente oxígeno alrededor de sus cuerpos incluso en las alturas donde los niveles de oxígeno son bajos.




sábado, 21 de mayo de 2016

RESERVA NATURAL DIVISADERO LARGO

Su nombre hace referencia al cerro Divisadero Largo, un punto panorámico que para los indígenas quizás haya constituido un sitio de avistaje de animales, como guanacos y choiques, a los cuales les daban cacería.
La reserva posee diversos valores ambientales, como la presencia de una falla geológica y las evidencias de su desplazamiento, que han conformado el afloramiento de diferentes niveles de rocas de origen sedimentario que representan un intervalo de tiempo mayor de 200 millones de años; el hallazgo de numerosos y variados fósiles en estas rocas, el estudio de procesos de erosión, escurrimiento y sedimentación, por hallarse en una zona de fuerte incidencia de estos factores de modelado terrestre; la presencia de una alta biodiversidad en flora y fauna, por hallarse enclavada dentro de un ecotono o zona de transición entre dos ecorregiones: el monte y el cardonal; el hallazgo de sitios arqueológicos ocupados por los primitivos habitantes de Mendoza en distintos períodos de tiempo, que van desde hace 8.000 años hasta los tiempos poscolombinos; la existencia de restos de una antigua explotación minera que está íntimamente ligada a la historia y al progreso de la ciudad de Mendoza.
La totalidad de las rocas presentes se formó bajo ambientes continentales: ríos, lagos, lagunas, deltas, ambientes salinos y abanicos aluviales. Éstos fueron ocupando alternadamente la región y dejaron a través del tiempo enormes volúmenes de sedimentos. Por último, luego de la elevación de la Cordillera de los Andes y en el Cuaternario (abarcó los últimos dos millones de años), la Precordillera aportó materiales que cubrieron las formaciones antiguas.
La flora y la fauna actuales del ecosistema piedemontano son sumamente diversas. Entre las especies típicas de la planicie se encuentran algarrobos, chañares brea, y animales como el zorro gris, el jote, la martineta. Y dentro de las especies propias de la precordillera encontramos muchas cactáceas, yales, piquitodeoros, zorros colorados, águilas moras y demás. Tanto el ñandú como el suri (uno de la planicie y otro de la montaña respectivamente) antiguamente poblaban la zona, pero han desaparecido de la reserva con el avance de la ciudad hacia el piededemonte. Lo mismo está ocurriendo con el guanaco.


RESERVA NATURAL Y CULTURAL TELTECA

Esta reserva protege uno de bosques nativos más importantes que aún quedan en la provincia. Se ubica en la planicie nororiental de Mendoza, denominada Travesía de Guanacache. El nombre de la reserva deriva de la lengua huarpechrein o teñc (maduro) y chreca o teca (fruto o semilla), interpretado como “fruto maduro”. Éste posiblemente es el del algarrobo, que constituía un alimento base de los primitivos habitantes. 
El clima es desértico, con amplias variaciones de la temperatura que se traducen en veranos muy cálidos e inviernos fríos. Las temperaturas varían entre 48°C en verano y los -10ºC en invierno.
 La región posee una gran diversidad biológica, a pesar de estar ubicada en la zona más árida de Mendoza, la cual recibe por año, en promedio, 150 milímetros de lluvias. 
Desde el punto de vista biológico, la reserva está situada en la Ecorregión del Monte, con influencia de especies chaqueñas, entre las que se destaca el algarrobo dulce, un árbol que forma bosques abiertos de ejemplares dispersos. La existencia de esta especie depende del agua subterránea (napas freáticas), que en la zona se encuentra a una profundidad aproximada de 10 metros, por lo que domina en los sitios bajos o en médanos de escasa altura. Por eso se denomina “bosque freatófito” a esta formación vegetal. El algarrobo dulce constituye una presencia clave dentro del ecosistema de Telteca, ya que su protección garantiza la conservación de un gran número de especies vegetales y animales que dependen de él.
Su fauna es muy rica y está representada por una gran diversidad de especies herbívoras, como la mara, la vizcacha, el cuis, el tuco y los ratones de campo, entre otras. Entre los predadores aparecen zorros grises, hurones, gatos monteses, zorrinos y pumas. En la región nidifican más de 40 especies de aves, siendo las más características el sietecuchillos, la calandria, la monterita de collar, el gallito copetón, la chuña de patas negras y el ñandú. Recientemente se ha empezado a estudiar al águila coronada, un ave en peligro de extinción. Los médanos guardan una importante diversidad de reptiles, entre los que se destacan teius, lagartos colorados, tortugas y yararás. Los pobladores actuales, descendientes de los huarpes, utilizan este ambiente aprovechando la leña, las plantas forrajeras (para la cría de cabras) y el junquillo (para realizar tejidos con distintos fines). Son comestibles los frutos de chañares y algarrobos, y la fauna en general es un buen sustento de proteínas. Se abastecen de agua a través de jagüeles, que son precarios pozos cavados en la arena o la greda, de donde extraen agua cuya calidad no es la óptima.


viernes, 20 de mayo de 2016

RESERVA NATURAL PROTEGIDA VILLAVICENCIO

Los objetivos de la Reserva Natural Villavicencio, declarada oficialmente bajo esta denominación en 2001 por parte de la Dirección de Recursos Naturales Renovables de Mendoza, es proteger los ecosistemas naturales y las especies de flora y fauna nativa, preservar de la contaminación a los recursos hídricos, en particular a los cursos de recarga y a los acuíferos subterráneos de agua mineral natural.
Las aguas termales brotan desde las profundidades hasta los 1.760 msnm, de donde se encuentran, y son conocidas por su alta concentración de sales y propiedades minerales, utilizadas como terapias, circunstancia que dio lugar a que en 1940 se edificara el imponente hotel de estilo normando y que aparece en la etiqueta de la conocida marca de agua mineral.




RESERVA CAVERNA DE LAS BRUJAS

Es un área de gran belleza, donde el agua ha cavado profundas galerías subterráneas, tallando diversas formas muy singulares de estalactitas, estalagmitas, velos, columnas, formaciones coralinas, etc. Algunos de los sitios que el turista visita son la Sala de la Virgen, La Gatera, La Sala de la Estalagmita Gigante y Sala de los Encuentros. En el interior de la cavidad existen otra gran cantidad de lugares de singular belleza como es la Sala de la Madre, la Sala de las Flores, la Cámara de los Dioses, la Sala de las Arenas, el Jardín de las Brujas, etc.
Hay una fauna muy particular, adaptada a vivir sin radiación solar como son los colémbolos y los opiliones (pequeños arácnidos). Todas estas características hacen de la Caverna un sitio de gran atractivo para actividades turísticas y espeleológicas.



RESERVA LAS SALINAS

Este paraje se encuentra ubicado en el departamento de San Rafael, a 8 kilómetros de la localidad de El Nihuil, abarcando un área de 350 hectáreas.
Los bañados y la laguna se forman por dos brazos principales y varios más pequeños del Río Atuel que divagan por la llanura al alcanzar la desembocadura de El Nihuil y La Salina. El objetivo es la conservación del humedal formado por la misma y preservar su importante riqueza piscícola, ya que en ella se encuentran importantes poblaciones de perca criolla.
La vegetación en las tierras adyacentes corresponde a pastizales de junquillo y tupe en suelos arenosos sueltos. También pueden encontrarse arbustos bajos aislados de chirriadera y tomillo macho.
Las aves acuáticas son la fauna representativa de la zona, se observan cisnes, vizcachas, liebres de castilla, piches, perdices y choiques.


RESERVA LAGUNA DEL DIAMANTE

La reserva se sitúa 200 kilómetros al Sudoeste de la ciudad de Mendoza, dentro del departamento San Carlos. Fue declarada reserva en 1994. Posee unas 110000 hectáreas y está protegiendo un importante sector de la cresta de la Cordillera Principal, en los Andes Centrales, que comprende al Volcán Maipú de 5323 metros y la laguna propiamente dicha, a 3300 metros de altura. Esta laguna es uno de los principales reservorios de agua dulce de la provincia.En este lugar se encuentran guanacos, zorros colorados y patos, entre otros animales silvestres.
A comienzos del período Cuaternario se produjo el colapso de una enorme caldera volcánica de 14 a 17 kilómetros de diámetro, donde actualmente se ubica la laguna. Las calderas podrían asemejarse a enormes ollas producidas por hundimiento o colapso de un volcán. Se produjeron además grandes erupciones de cenizas volcánicas ricas en silicio. Las rocas más importantes luego de la formación de la caldera son lavas provenientes del volcán Maipo. Sus erupciones construyeron un edificio de aproximadamente 5200 metros. Este volcán presenta una típica forma triangular que reflejada en la Laguna forma el Diamante, al que hace referencia el nombre.
Un aspecto a destacar son los efectos del congelamiento estacional. La acción del frío y las cubiertas de nieve provocan diversos procesos, pudiéndose destacar la crioclastía, es decir la fracturación de las rocas por efectos de la expansión del hielo presente en las grietas y también por amplitud térmica. Los flujos de destritos a lo largo de las laderas son muy comunes en áreas con grandes cubiertas de materiales de origen volcánico, piroclastos, una de las características principales del área de la reserva.
Es interesante señalar los efectos sobre la vegetación, donde las matas de gramíneas adquieren generalmente la forma de círculos o semicírculos. La geocriología es la ciencia que estudia los efectos de las bajas temperaturas sobre la superficie de la tierra. El congelamiento y descongelamiento del suelo ejerce un efecto fundamental sobre los materiales de la corteza y a su vez determina la distribución de plantas y animales. Una condición muy importante es el tiempo durante el cual esas capas de la parte superior de la corteza permanecen congeladas y el tiempo durante el cual ellos están sometidos a ciclos continuos de congelamiento y descongelamiento. Toda la Cordillera de los Andes se considera como tierra fría o criogénica.
Las especies animales y vegetales que allí habitan son de particular interés, demostrando notables adaptaciones a la vida de altura y concentrándose hacia las partes más bajas del parque. La vegetación predominante es un matorral subarbustivo muy abierto y bajo de leña amarilla y yareta, con pastizales de huecú (especie de pasto de la montaña) que se tornan más bajos y densos con diferente composición de especies en las vegas, que corresponden a sitios de acumulación de agua. Los suelos son pobres en nutrientes, manteniéndose congelados la mayor parte del año.
Esta reserva protege amplias áreas de veraneo de grandes manadas de guanacos que migran a regiones bajas del departamento de San Carlos durante el invierno. En los sitios abiertos habita el cauquén, especie de pato que se alimenta de plantas y semillas, y la caminera que consume insectos a nivel del suelo. Existen varias especies de ratones de la montaña que se refugian en madrigueras para evitar predadores como el águila mora y zorro colorado. La laguna no posee peces autóctonos, se realizó la siembra de truchas que son aprovechadas para la pesca deportiva.


RESERVA MANZANO HISTÓRICO

La Reserva Provincial del Manzano Histórico se encuentra ubicada en el Departamento de Tunuyán, a una altitud de 1200 metros sobre el nivel del mar, a 120 kilómetros de la ciudad de Mendoza y a 40 kilómetros de la ciudad de Tunuyán. Abarca una superficie aproximada de 1000 hectáreas. Protege el monumento histórico Sanmartiniano. Se destaca por su paisaje y la calidad de las aguas de sus arroyos lo que la transforma en un excelente atractivo turístico. En el área se encuentra una importante estación piscícola de la Dirección de Recursos Naturales Renovables, que sirve para abastecer de salmónidos a los principales arroyos de la provincia.
La Reserva se encuentra en el sector este del Cordón del Portillo en la Cordillera Frontal, incluyendo un sector pedemontano. La Cordillera Frontal, está adosada a la Cordillera Principal y desaparece al sur del río Diamante, con alturas que alcanzan los 5000 y 6000 metros sobre el nivel del mar. Es un macizo muy antiguo de edad precámbrica y paleozoica, penetrado por cuerpos graníticos y otras rocas magmáticas.
En el Cordón del Portillo el relieve está elaborado sobre una y otra asociación de rocas volcánicas como riolitas y dacitas. Las culminaciones del relieve apenas alcanzan en el Cordón del Portillo la curva de nivel de los 5500 metros, siendo por consiguiente esta zona más baja que el Cordón del Plata. Esto reduce significativamente las precipitaciones, siendo el clima de una acentuada aridez.
El clima árido ha favorecido la formación de suaves superficies de erosión en el piedemonte (pedimentos), los que han sido cubiertos por depósitos de antiguos abanicos aluviales.
En el área se encuentran presentes dos arroyos: el Arroyo Pircas y el Arroyo Grande. Presentan un régimen permanente y sus aguas se originan mayoritariamente a partir del deshielo en la alta Cordillera. Sus caudales presentan un aumento notorio en los meses de Diciembre y Enero. Sus características físico químicas permiten clasificarlas como excelentes tanto para consumo humano como para riego.
Al tratarse de un ecosistema de extrema elevación y bajas precipitaciones que lo torna de clima riguroso la biodiversidad es baja. Sin embargo, las especies animales y vegetales que allí habitan son de particular interés, demostrando notables adaptaciones a la vida de altura y concentrándose hacia las partes más bajas del parque.
La vegetación que predomina son los pastizales abiertos de altura de huecú (especie de pasto de la montaña) con áreas limitadas de matorrales arbustivos bajos como la leña amarilla y el cuerno de cabra. En general, la vegetación está adaptada a soportar bajas temperaturas, suelos pobres muy minerales y las tormentas de nieve y viento. Todo esto es lo que le da su aspecto achaparrado y de matas que crecen en cojín. Existen vegas donde se acumula agua y crece otro tipo de vegetación que soporta largos períodos de congelamiento del suelo. En las partes pedemontanas más bajas las comunidades arbustivas son más altas y cerradas.
Las especies animales más típicas son el cóndor, el águila mora, los guanacos, zorros, los ratones de montaña, la agachona, destacándose una especie de sapo y una de lagartija, ambas típicas de la montaña. Las liebres europeas son muy abundantes, siendo un animal exótico asilvestrado en la región.


RESERVA PARQUE PROVINCIAL VOLCÁN TUPUNGATO

El parque se sitúa a 110 kilómetros al Sudoeste de la ciudad de Mendoza, siendo la única reserva compartida por dos departamentos: Luján y Tupungato. Se declaró reserva en 1983. Comprende unas 150000 hectáreas, protegiendo un importante sector de los Andes Centrales. Su objeto de creación es el Volcán Tupungato de 6820 metros, con sus nieves eternas, y los ambientes cordilleranos únicos que protege.
El término Tupungato deriva de la lengua quechua que refiere a tierra que verdea. Es una continuidad del Parque Aconcagua y de ambiente similar. El puesto de guardaparques se ubica en el Refugio Santa Clara.
El área abarca dos grandes estructuras: la Cordillera Principal y la Cordillera Frontal, ubicadas respectivamente al oeste y al este del valle longitudinal del río Tupungato, que prácticamente las separa. Al pie oriental de la alta montaña del Cordón del Plata se extiende el área pedemontana. La Cordillera Frontal, está adosada al este a la Cordillera Principal y desaparece al sur del río Diamante. Con alturas que alcanzan los 5000 y 6000 metros sobre el nivel del mar, es un macizo muy antiguo penetrado por cuerpos graníticos y otras rocas magmáticas. La División de los altos Andes en Cordillera Principal y Frontal, es más geológica que biológica debido a que todos los elementos orográficos se encuentran estrechamente soldados entre sí, separándolos sólo los profundos valles longitudinales de ríos como el Tupungato, entre las dos cordilleras o el valle de Uspallata entre cordillera Frontal y Precordillera.
Dos ríos principales recogen las aguas a partir de la masa volcánica de Cerro Tupungato: hacia el norte el río Tupungato y hacia el sur el río Tunuyán, se agregan los ríos de las Tunas y Anchayuyo, que drenan las aguas de la Cordillera Frontal hacia el río Tunuyán en su tramo a través de la llanura pedemontana.
La red hidrográfica se alimenta casi exclusivamente del derretimiento del hielo y de la nieve, insumiéndose una gran parte de sus caudales en el piedemonte, abasteciendo las napas de agua subterránea. Esta es una de las funciones más importantes de este parque, las reservas de agua dulce. Las rocas más antiguas de la región constituyen el basamento cristalino (como su nombre lo indica la base, de edad Precámbricas el cual ha sido plegado y muy modificado por presión y temperatura, es decir metamorfizado). En la región se encuentran sedimentos de origen marino y un conjunto de rocas volcánicas de más de 300000 millones de años (Pertenecientes al Paleozoico). Posteriormente se produce una acumulación de sedimentos continentales y marinos (calizas, yeso) durante el Mesozoico (entre 210 y 65 millones de años).
Durante el período Terciario superior (Plioceno) y Cuaternario debido a la presencia de enormes fuerzas vinculadas al levantamiento de Los Andes, en algunos lugares se produjeron fracturas o zonas de debilidad, lo que favoreció la manifestación de eventos volcánicos. Algunos volcanes conservan aún la forma de conos achatados, a pesar de la destrucción avanzada y prolongada por los procesos erosivos. Un aspecto a destacar es la presencia de glaciares, que tuvieron un gran avance durante el periodo Cuaternario. Como el resto de los sistemas montañosos del mundo la región exhibe una gran variabilidad de formas y procesos. Las altas tasas de erosión y sedimentación son producto de eventos cíclicos episódicos a través del tiempo.
Una completa sucesión de rocas volcánicas están a la vista en el Cerro Tupungato. Las rocas forman un cerro volcánico bastante gastado sobrepuesto a una muy antigua planicie. En su cima hay cráteres lo que confirma que el Cerro Tupungato es un antiguo volcán, apagado y profundamente desmantelado, coronado por extensos glaciares. Durante el Pleistoceno se formó una lengua glaciar de más de 26 kilómetros de longitud.
Al tratarse de un ecosistema de extrema elevación y bajas precipitaciones que lo torna de clima riguroso la biodiversidad es baja. Sin embargo, las especies animales y vegetales que allí habitan son de particular interés, demostrando notables adaptaciones a la vida de altura y concentrándose hacia las partes más bajas del parque. La reserva está comprendida dentro de la provincia fitogeográfica Altoandina. La vegetación que predomina son los pastizales abiertos de altura de huecú (especie de pasto de la montaña) con áreas limitadas de matorrales arbustivos bajos como la leña amarilla y el cuerno de cabra. En general, la vegetación está adaptada a soportar bajas temperaturas, suelos pobres muy minerales y las tormentas de nieve y viento.
Todo esto es lo que le da su aspecto achaparrado y de matas que crecen en cojín. Existen vegas donde se acumula agua y crece otro tipo de vegetación que soporta largos períodos de congelamiento del suelo. En las partes pedemontanas más bajas las comunidades arbustivas son más altas y cerradas.
Las especies animales más típicas son el cóndor, el águila mora, los guanacos, zorros, los ratones de montaña, la agachona, destacándose una especie de sapo y una de lagartija, ambas típicas de la montaña. Las liebres europeas son muy abundantes, siendo un animal exótico asilvestrado en la región.


RESERVA DE LA BIÓSFERA DE ÑACUÑÁN

La Reserva Ñacuñán está localizada a 180 kilómetros al Sureste de la Ciudad de Mendoza, en el departamento de Santa Rosa. Protege unas 12600 hectáreas de bosque nativo de algarrobo y fue declarada reserva en 1961, quedando incorporada a la red mundial de reservas de la Biosfera (UNESCO) en 1986. Su nombre deriva de la lengua pehuenche Neyku-ñan nombre del último cacique de Malargüe, aliado de San Martín, que significa águila blanca, nombre con que la gente de campo refiere al aguilucho común.
La región que comprende a la reserva se sitúa en la Travesía (llanura) de Tunuyán dentro de la provincia fitogeográfica del Monte con muchos elementos chaqueños. Esta área protegida es visitada por un gran número de científicos que realizan investigaciones sobre la flora, la fauna, el clima, los suelos.
Por esta razón, se cuenta con una estación biológica y una estación metereológica que registra datos de lluvias, temperaturas y vientos permanentemente. Es interesante destacar que Ñacuñán fue la primer área protegida de la provinca de Mendoza, la que es actualmente administrada por el Instituto Argentino de Investigaciones de Zonas Aridas.
El objeto de creación de la reserva lo constituye el bosque de algarrobo que se halla en recuperación luego de una tala indiscriminada desde principios de siglo hasta 1937. Este árbol era utilizado para la extracción de leña y carbón que abastecía el ferrocarril y la ciudad. Luego se sumó la ganadería que constituyó otro impacto sobre el ecosistema.
El ecosistema de los bosques de algarrobo. La vegetación crece sobre suelos arenosos y arcillosos lo que determina dos comunidades bien diferentes: los algarrobales y los jarillales respectivamente. La primera comunidad toma su nombre por la abundancia de algarrobo acompañado por chañares en el estrato arbóreo. El estrato arbustivo está dominado por jarilla, llaullines, verbena áspera, zampa, piquillín y atamisqui. El estrato herbáceo está compuesto en su mayoría por numerosas especies de pastos. Los jarillales propiamente dichos son más pobres en el número de especies aunque a veces poseen un pastizal muy denso de pasto de hoja.
La fauna es muy rica destacándose una gran diversidad de aves. La abundancia de algarrobos determina que exista un gran número de especies por cuanto provee refugios, sitios de nidificación y alimentación. Habitan el gallito copetón, la monterita de collar, el yal carbonero (especie endémica del Monte Central), tres especies de pájaros carpinteros, picapalos, sietecuchillos, diuca, chingolos, calandritas, canasteros. Entre los mamíferos, los más abundantes son los cuises, piches y los ratones de campo. Otros herbívoros son las vizcachas, la mara y el tuco-tuco. Se encuentran zorros grises, hurones, zorrinos, gatos monteses y del pajonal.
La Travesía, es una enorme llanura de acumulación de sedimentos, ocupa el centro-norte y este de la provincia. Conforma una gran cuenca sedimentaria limitada por fallas. En la actualidad se presenta como una suave y extendida llanura con suave pendiente regional, de oeste a este, hacia el curso del río Desaguadero, en el límite con la provincia de San Luis. Su relieve llano, homogéneo está modelado principalmente por el viento, donde los depósitos eólicos de edad Holocena (últimos 10000 años) tienden a extenderse sobre la superficie como una consecuencia tanto de la aridez, como de la acción antrópica.
Amplios sectores de la llanura están ocupados por campos medanosos algunos de hasta 20 metros de altura, desprovistos de vegetación, con una gran movilidad, y otros estabilizados (la mayor parte) donde se conserva el monte virgen de la región.
Entre los cordones medanosos se presentan pampas o playas con salitre, conocidas con el nombre de “ramblones”, cuencas cerradas por la acción erosiva del viento, desprovistas de vegetación debido a la asfixia radicular producida por el agua que se acumula esporádicamente en estas depresiones y por la elevada concentración salina.
Las características de los suelos dependen en gran medida de los tipos de sedimentos: arenosos en los médanos, limosos y limoarenosos en las planicies y limosoarcillosos en los sectores más bajos y ciénagas.


RESERVA CASTILLOS DE PINCHEIRA

Castillos de Pincheira se ubica en los faldeos orientales, de la cordillera principal o del límite, en el departamento de Malargüe, a 28 kilómetros de la ciudad cabecera del departamento, comprende un total de 650 hectáreas.
Enmarcados en un ambiente de clima seco, la formación rocosa denominada “Castillos” está compuesta por un conjunto sedimentario-volcánico, en las vertientes del Cerro Algodón, de 2163 metros, sobre la margen derecha o sur del río Malargüe.
Los objetivos de creación lo constituyen por un lado su importancia paisajística, y por el otro la conservación de la cuenca media del río Malargüe que provee de agua potable a la ciudad homónima.
Está compuesta por un conjunto sedimentario volcánico. Su origen se debe a erupciones explosivas de volcanes vecinos, posiblemente a fines de la Era Terciaria. Hoy su clara estratificación y la acción desgastante y modeladora del agua y el viento, han generado un lugar de gran atractivo turístico por su belleza paisajista. Estos agentes actúan sobre rocas sedimentarias, especialmente areniscas. Al pie de esta formación, se observa una gran variedad de conos de derrubio, producto del descenso del material.
Este monumento natural se encuentra inserto en un clima árido, con escasas precipitaciones que se producen en forma de aguaceros en verano. Un elemento climático característico es el Viento Zonda. El agua y el viento le confieren extrañas formas, asemejando un gran castillo con sus torres. Su altura aproximada es de 60 metros, La zona se caracteriza por la presencia de bardas, formaciones rocosas de escasa altura, cortadas a pique.
En esta zona se encuentran evidencias arqueológicas. Las formaciones naturales de difícil acceso eran utilizadas por los Pehuenches, que las acondicionaban con fines defensivos.
Biogeográficamente la reserva se encuentra en el Bioma de Patagonia. La vegetación es rala y se compone de arbustos como molles y chirriaderas y pastos xerófilos como tupe y coirones. A la vera del río se destacan vegas o mallines, cuya provisión permanente de agua en el suelo promueven una increíble riqueza y diversidad vegetal.
Antiguamente habitaban en la zona guanacos y choiques. Por causas de la presión humana desaparecieron de allí.
Con su reciente creación, se espera la recolonización natural por estas especies. Además se encuentran vizcachas serranas, pumas, zorros colorados y hacia las zonas más elevadas, cóndores y águilas moras. El río es habitado por bagres autóctonos. En la cuenca se destaca el otuno o bagre aterciopelado, reconocido como especie amenazada de extinción a nivel mundial. El pato del torrente, también señalado como vulnerable de extinción, es abundante, lo que indica un excelente estado del ambiente por la calidad de las aguas y el cuidado actual de la fauna.


RESERVA TOTAL LA PAYUNIA

Esta reserva ubicada en el departamento de Malargüe tiene características únicas de orden geológico y vulcanológico. La gran concentración de conos volcánicos permite hacer una lectura de la evolución del planeta.
En esta reserva se está implementando el Proyecto “Uso sustentable de guanacos silvestres”, el mismo tiene por finalidad generar una experiencia por intermedio de la cual se evalúe la silvestría como herramienta de manejo de las poblaciones de camélidos de la provincia, la cual permitirá generar los antecedentes legales y técnicos para establecer los marcos normativos por los cuales se regulen similares experiencias que se pudieran realizar a futuro en la provincia de Mendoza. Por tal razón, se trata de una experiencia piloto y no de un aprovechamiento comercial.


RESERVA FAUNÍSTICA LAGUNA DE LLANCANELO

La reserva se ubica al Sur de la provincia de Mendoza a 470 kilómetros de la ciudad capital y a 65 kilómetros al Este de la ciudad de Malargüe, en el departamento del mismo nombre. El área fue declarada en 1980 y protege unas 40000 hectáreas abarcando todo el espejo de agua de la laguna que le da el nombre a la reserva.
El término Llancanelo deriva de la voz indígena Yanca = piedra de cuarzo con la que cosntruían las puntas de flechas, y Nelo = color verde – azulado, que se estima hace referencia al aspecto de la laguna de forma triangular, que observada desde lugares altos adquiere la forma de punta de flecha que construían los nativos para cazar.
El motivo fundamental de creación es la riqueza de aves acuáticas, ya que corresponde a uno de los sitios de nidificación, alimentación y migración de aves acuáticas, se la considera uno de los humedales más importantes de Sudamérica. El puesto de guardaparque se denomina Carilauquen.
En contraposición a la elevación de los Andes, en diferentes sectores, adyacentes a las montañas, se formaron depresiones, como la extensa Depresión de Los Huarpes. En el sector sur de esta depresión y en el denominado bajo de Llancanelo se ubica la laguna.
Paisaje
La laguna limita al sur y al este con la región de la Payunia, destacándose el antiguo volcán conocido como Cerro Carapacho. Este volcán presenta la particularidad que las lavas que le dieron forma eran muy fluidas (se denomina hidroclástico, ya que estaban mezcladas con agua) y su forma es de ancha base y poca altura. Se encuentra además el Volcán El Trapal y el Coral. La laguna presenta una extensión de aproximadamente 50 kilómetros en sentido Norte-Sur y 10 a 12 kilómetros Este-Oeste y la profundidad es en casi su totalidad menor a un metro. Las precipitaciones son escasas no obstante, el espejo de agua es alimentado por arroyos permanentes y semipermanentes. La superficie del espejo fluctúa sensiblemente de año en año en función de los aportes de sus afluentes principales y la superficie total de la cuenca de aporte es de 4600 kilómetros cuadrados (una cuenca hídrica representa toda el área cuyas aguas drenan hacia un mismo sector). En el norte desemboca el río Malargüe, su principal afluente superficial, formando esteros y bañados.
Hacia el noroeste algunas vertientes forman vegas pastosas e incluso originan arroyitos de corto recorrido, como los Arroyos Carilauquen, Menucos y Carapacho. El ambiente constituye un conjunto formado por bañados, ciénagas, salinas y el espejo de agua. En general se manifiesta un aumento de las condiciones de salinidad en los suelos a medida que nos acercamos a la laguna, lo que condiciona a las comunidades vegetales acorde a las concentraciones de sal del suelo. Lo más impactante con relación a la fauna es la gran diversidad y abundancia de aves acuáticas. Este sitio resguarda una de las poblaciones nidificantes de flamencos más importantes del mundo (tres especies). Los flamencos son especialistas en alimentarse, filtrando plancton y pequeños organismos por unos diminutos canales que poseen en el interior de sus picos que sumergen de manera invertida en el agua.
También nidifican más de 10 especies de patos, entre los más vistosos se encuentran el cisne de cuello negro y el cisne coscoroba. Los patos se alimentan sobre la superficie del agua con sus picos aplanados donde toman semillas y pequeños animales que flotan sobre el agua. Existen gallaretas y garzas de varias especies, las primeras consumen vegetación sumergida, y las garzas capturan peces y pequeños vertebrados y artrópodos. Como ruta migratoria esta región es importante para playeros y chorlitos que obtienen su alimento hundiendo su pico en el barro de las aguas someras para obtener pequeños crustáceos y otros invertebrados.
Como es de notar las aves acuáticas poseen una gran diversidad de maneras de aprovechar los recursos alimenticios y de esta forma pueden convivir con más de 220 especies de aves sin sobreponerse en sus hábitos. Asimismo las modalidades de nidificación son variadas como los pequeños “cono trunco de barro” de los flamencos, las plataformas de vegetación acuática de las gallaretas, la construcción de nidos sobre matorrales por las garzas o simplemente la nidificación sobre el suelo por los patos y chorlos.
Además de las aves, existen otras especies acuáticas como el coipo, roedor mediano, adaptado a la vida en el agua con sus patas palmeadas para nadar hábilmente y sus madrigueras cavadas en la rivera donde también obtiene vegetación acuática o de la orilla para alimentarse. En la fauna de peces se destaca la presencia del pejerrey patagónico que se alimenta de plancton. En los ambientes terrestres que rodean a la laguna existen vizcachas, cuises, piche, zorros grises y colorados, choiques y culebras. En los salares que circundan la laguna habita un roedor endémico considerado amenazado que construye su madriguera en dunas bajas: la rata vizcahca del salar. Se alimenta de vegetación halófila, siendo una de las especies de mamíferos más adaptadas a la vida de desierto en el mundo. Las comunidades vegetales dominantes son matorrales arbustivos altos abiertos y estepas herbáceas bajas. Son características tres especies de jumes (arbustos salados) y pastos salados en las zonas bajas de mayor concentración de sal.
Hacia las partes más elevadas de pequeños médanos encontramos zampa, chuquiraga y llaullines. En la laguna se destaca vegetación subacuática, vegetación de bañados como juncos, cortaderas y totoras.


RESERVA PARQUE PROVINCIAL ACONCAGUA

Parque Aconcagua está ubicado en el departamento de Las Heras. Su principal atracción es el Cerro Aconcagua, que con sus 6960 metros se corona como la montaña más alta de América. La zona se destaca por sus glaciares como reservorios de agua dulce y sus restos arqueológicos.
El origen del nombre Aconcagua deriva del término Quichua ACKON-CAUAK, que significa centinela de piedra. La región se caracteriza por ser árida y rocosa, con altas cumbres cubiertas de nieve permanente. La vegetación es pobre y cubre las laderas hasta los 4000 metros de altura, pueden observarse hierbas como el Coirón y arbustos achaparrados como la Leña Amarilla.
La fauna también es escasa y muestra adaptaciones especiales para soportar tal aridez. Una de las aves más frecuentes es el majestuoso Cóndor llamado también el rey de los andes.
Algunos de los principales atractivos del Parque son: Cerro Aconcagua, Laguna de Horcones, Plaza de Mulas o Plaza Francia. Los mismos permiten que este monumento natural se haya transformado en una unidad auto sustentable económicamente. Esta fama internacional ha exigido inversiones y mejoras en los servicios a los turistas. Además, se realizan actividades como excursiones, camping, escalada, montañismo, trekking.


RESERVA PUENTE DEL INCA

Este lugar de incalculable belleza está ubicado en Las Heras y es considerado una geoforma única en el mundo. Debido a sus características particulares no pasará mucho tiempo para ser designado patrimonio de la humanidad. Es un puente natural formado por minerales y microorganismos biológicos como algas, que se encuentra sobre el río Cuevas. Lleva el nombre de Puente del Inca porque era utilizado por los incas antes de la conquista de América. Se cree que miles de años atrás se formó un puente de hielo y que, después con las avalanchas, las aguas termales y el tiempo se solidificó la “construcción”.
Del equilibrio entre el aporte permanente de aguas termales y los componentes biominerales (que le dan el color rojizo al puente), depende la supervivencia de este monumento.

            

ÁREAS NATURALES PROTEGIDAS

Las áreas naturales protegidas son territorios seleccionados por el hombre para su protección y conservación, por poseer características importantes como biodiversidad y son de importancia ecológica por el valor, singularidad o rareza de sus elementos naturales, su valor paisajístico destacado, sistemas naturales sustentadores de vida que presten servicios ambientales al propio ecosistema o al hombre. Son patrimonio natural y cultural representativo del pasado y presente de una región determinada, que representan la identidad de una población y recursos naturales estratégicos para el desarrollo social y económico de una región.